BOLILLO EN MANO

Se habla en las calles, en medios de transporte, en medios de comunicación, en todos los rincones de Colombia. Algunos hacen comentarios disimulados, otros demagógicamente exponen sus críticas.

Especialmente las mujeres se sienten totalmente indignadas por el infortunado suceso en que el reciente técnico de la selección Colombia de fútbol de mayores, Hernán Darío "El Bolillo" Gómez, agredió físicamente a una mujer en un bar de la capital de la República.

Como mínimo la golpeó en cuatro oportunidades, según testigos presentes en 'El Bembé', escenario de los hechos. Llegó antes de media noche con una acompañante, con quien compartió media botella de aguardiente. Todo transcurría tranquilamente.

A la 1:30 de la mañana decidió salir. Pocos minutos después, los habituales fumadores de la entrada del establecimiento vieron cómo Gómez discutía con su 'amiga'. De repente, las palabras se cristalizaron en golpes certeros.

La solidaridad femenina quiso hacer presencia. Mujeres del bar intentaron agredir al 'Bolillo'. Un hombre lo tomó del cuello desafiándolo a pegarle en lugar de la mujer. El barullo fue interrumpido por un cuidador de vehículos.

El humilde pacifista dirigió a la pareja del conflicto hacia una vía principal, los ubicó en un taxi, y le dio indicaciones al técnico acerca del trato caballeroso hacia una mujer. Su compensación fueron 100 mil pesos entregados por Gómez.

Unos minutos más tarde regresaron al bar a recoger el bolso de la mujer, de quien no se conoce su identidad, algo que resulta comprensible y muchísimo más seguro.

Los habituales visitantes del bar ya habían visto a esta pareja en otras ocasiones. Infortunadamente, en esta ocasión, la velada tuvo un final trágico, revelado por un anónimo quien se comunicó con 'La W Radio'.

El tema no ha dejado de sonar. Todo el mundo quiere opinar. Muy pocos han respaldado al 'Bolillo'; quienes le han defendido, sugieren buscar mecanismos de orientación para el ser humano, antes que críticas destructivas.

Oportunistas han hecho del suceso un catalizador de sus politiquerías, enmascaradas a través de frases de 'indignación' y 'apología a los derechos de la mujer', coincidiendo accidentalmente con la temporada electoral.

'El Bolillo' debió renunciar a la dirección del combinado colombiano debido a las presiones de la sociedad, catapultadas por la posición acusatoria de Bavaria SabMiller, principal patrocinador del equipo. 

El caso ya está en manos de la Fiscalía, tras la acción del abogado Carlos José Castro, quien argumenta que la ley de protección a la mujer no requiere de la denuncia de la víctima para iniciar el proceso.

Hernán Darío Gómez manifiesta estar arrepentido de esta "embarrada" que le ha causado problemas tanto públicos como al interior de su familia. Está dispuesto a recibir ayuda profesional.

El peso de las circunstancias es suficiente disciplina para Gómez. El eco mediático es una posición innecesaria y oportunista. Su renuncia y su arrepentimiento no borran el error, pero abren paso a un cambio que ojalá sea positivo.