El mundo médico internacional, y especialmente el colombiano, se encuentra muy triste por el fallecimiento de uno de sus más grandes exponentes, el médico barranquillero, de origen libanés, Salomón Hakim.
A sus 81 años una posible embolia cerebral se lo llevó en la madrugada del reciente 5 de mayo, dejando un vacío en su familia y en los campo de la neurociencia, la medicina, la neurocirugía y la ingeniería biomédica, campos de su dominio en universidades colombianas.
El doctor es conocido por describir la hidrocefalia normotensiva, conocida como Síndrome de Hakim; así también llamada la válvula de derivación ventrículoperitoneal que inventó para el tratamiento quirúrgico de esta anomalía. Además por cerca de 30 patentes por otros inventos.
La válvula de Hakim regula el flujo de líquidos intracraneales, y consecuentemente el efecto que tienen en el sistema nervioso. Este sistema ha permitido la recuperación de pacientes que estaban condenados a vivir en invalidez permanente.
Paz en su tumba. Gracias, doctor Hakim por todo su legado.
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